La carretera del Pamir es la carretera que atraviesa la Cordillera del Pamir y que se ubica en Tayikistán. Es famosa por ser una de las más altas del mundo, y es que uno de sus pasos de montaña alcanza los 4.655 metros de altitud.
Está claro que si hay algo que hace famosos a Tayikistán es esta mítica ruta.
La carretera del Pamir
Oficialmente, la carretera del Pamir es la carretera M-41 que va desde Afganistán hasta Kirguistán pasando por Uzbekistán y Tayikistán. Aunque el tramo más famoso es el que va desde Dushambe, la capital de Tajikistan, hasta Osh, en Kirguistán, con sus 1252 kilómetros.
Esta ruta ha sido utilizada durante miles de años, pues las montañas no dejan muchas opciones para atravesar sus pasos y valles y era un camino habitual de la Ruta de la Seda. De hecho, hasta estas montañas llegó el mismísimo Marco Polo que se asombró de su altura, de lo inhóspitas que son y de unas cabras salvajes de grandes cuernos que de hecho hoy en día llevan su nombre.
Las distintas opciones
Para atravesar la cordillera en este tramo hay 3 opciones:
En realidad desde Dushambe a Qalai Khumb hay dos caminos, el del norte y el del sur. Si miras en Google Maps te recomienda ir por el sur, yo te recomiendo ir por el norte. La carretera es un desastre, quizá uno de los peores tramos, pero también verás algunos de los paisajes más espectaculares. No lo dudes, la ruta norte.
La M41 – En rojo
Este tramo es el oficial y el que supuestamente está asfaltado. Y digo supuestamente por qué la mayor parte de los tramos lo estuvieron a finales del siglo XIX y comienzos del XX, pero ya solo quedan trozos de asfalto levantado que lo único que hacen es dificultar la ruta.
Es la ruta que suelen seguir los tayikos cuando desplazan por la región pues, a pesar de todo, es el tramo más rápido y en mejor estado.
El Valle del Bartang – En morado
La ruta en peor estado y la más aventurera pues tiene varios ríos para atravesar y además se encuentra bastante aislada. No hay pueblos y apenas hay población.
Para acceder a esta ruta hay un desvío antes de llegar a la ciudad de Khorog y se une a las otras rutas pasado el paso del Ak-Baikal.
El Valle del Wakhan – En azul
El tramo más popular es el camino que va pegado a la frontera de Afganistán, de hecho tienes el país a, literalmente, tiro de piedra.
El valle del Wakhan tiene vistas tanto de las montañas de Tayikistán como de las imponentes montañas y glaciares del lado de Afganistán. Mientras vas al lado de río Panj, atravesando pueblos y los pocos lugares aptos para el cultivo de esta zona.
Nuestro recorrido
A nosotros nos llevó 10 días completar la ruta del Dushambe a Osh. Normalmente, la gente lo hace en la mitad de tiempo (en vehículos motorizados) pero a nuestra moto le costó un poco más que a las flamantes BMW con las que nos cruzábamos.
Tras nuestro accidente con la moto (lo cuento en Sangre y huesos rotos en Tayikistán) y los días de reposo pudimos volver de nuevo a la ruta.
Como te comentaba, desde Dushambe optamos por recorrer la ruta norte hasta Qalai Khumb. Una vez terminan los primeros 70 kilómetros de asfalto empiezas a adentrarte en las montañas y el paisaje se va haciendo cada vez más abrupto y cada tramo más espectacular.
El pueblo de Qalai Khumb tiene varios alojamientos y lugares donde poder comer al lado del caudaloso río Panj. Desde aquí vas siguiendo el curso del río que hace de frontera con Afganistán.
Desde Khorog la ruta es algo mejor. Y digo algo porque hay tramos en los que el mal estado del asfalto es peor que ir por tierra. La ciudad de Khorog es la más grande de esta zona, tiene variedad de alojamientos, restaurantes y además hay una oficina de turismo donde es posible informarse de la ruta ¡Ah!, y te dan una lista de alojamientos a lo largo del recorrido, ¡algo que viene muy bien!
Valle de Wakhan
Desde Khorog nosotros decidimos continuar el Pamir por el valle de Wakhan. La primera parada desde allí fue en Garmchashma, un pueblo de aguas termales donde podrás darte un baño. Son piscinas controladas y los horarios de hombres y mujeres son distintos…
La ruta sigue pegada al río y a la frontera afgana. Y es aquí, mientras recorríamos el valle de Wakhan, que pudimos ir viendo los únicos campos de cultivo de la zona, más bien árida en su conjunto. Los campos de trigo, los pueblos y algún que otro vestigio histórico se van sucediendo a lo largo del valle.
Entre estos restos históricos destaca la fortaleza de Khakh Kaha, más interesante por las vistas que hay desde lo alto que por lo que realmente queda de ella. Una estupa budista en el pueblo de Vrang y unos petroglifos en el pueblo de Langar completan las visitas históricas. Poco antes de llegar a la estupa, en el pueblo de Yamchun, hay otra fortaleza y los baños termales de Bibi Fatima.
Una de las cosas más maravillosas del valle, o por lo menos para nosotros, es el pan. Pan casero hecho por cada familia en su propio horno. Desde los campos de trigo a la mesa todo se produce una forma artesanal que se nota en el paladar.
Desde el pueblo de Langar la carretera del Pamir abandona el valle y comienza el ascenso a las montañas.
De vuelta a las montañas
En esta subida los pueblos empiezan a desaparecer y las vistas de la cordillera se vuelven espectaculares.
Es cierto que se pasa por algunas poblaciones como Alichur o Murghab. En este último además se puede visitar el Bazar de Sary Kol, bastante pintoresco, o hacer alguna foto a la, aún presente, estatua de Lenin.
Tras pasar Murghab se encuentra el famoso paso Ak-Baital, a 4655 metros de altitud y una parada casi obligatoria en el recorrido. El cartel azul que marca la altitud es una de las fotos más populares del Pamir.
Tras el paso comienza un descenso que termina en el lago Kara-Kul y su pueblo homónimo. Última población antes de cruzar a Kirguistán.
El tramo de Kirguistán
La última etapa de la carretera del Pamir se adentra ya en Kirguistán. El paisaje empieza a ser un poco más verde, pero lo que más nos sorprendió es lo mucho que cambia la gente a un lado y otro de la frontera. En Kirguistán encontramos los primeros nómadas, con sus rebaños de caballos, sus yurtas y un carácter más frío.
Pronto se llega al pueblo de Sary-Tash desde donde hay bastantes trekkings por las montañas de los alrededores. Uno de los más espectaculares es el de la subida al pico Lenin y sus 7.134 metros sobre el nivel del mar.
Desde aquí todo empieza a estar muy bien asfaltado hasta el final de la ruta en la ciduad de Osh. Un núcleo urbano bastante grande donde puedes encontrar de todo. Tras las condiciones del Pamir nosotros agradecemos mucho la variedad de comidas que encontramos y las duchas de agua caliente.
Recorrer la carretera del Pamir por tu cuenta
Transporte
Honestamente, y desde mi punto de vista, no es un recorrido para hacer si no vas con vehículo propio, ya sea moto, bici o tu propio coche. El Pamir no merece la pena por sus pueblos o sus restos de la Ruta de la Seda, es un recorrido para disfrutar de la imponente naturaleza y no creo que sea algo que se pueda hacer yendo en taxi compartido desde el pueblo A al pueblo B.
Dicho esto, no hay autobuses, por eso lo del taxi compartido, que, por otro lado, no es nada barato considerando los precios generales del país.
La gasolina nunca es un problema, pues no hay grandes distancias sin que encuentres un lugar donde vendan, ya sea una pequeña gasolinera o una tienda que tiene botellas de gasolina. Aunque debes recordar que en altura se consume más y, por si acaso, si decides hacer el valle de Bartang deberías llevar un bidón con algunos litros de por sí acaso ya que por ahí no hay nada de nada.
Alojamiento
Hay multitud de gente que alquila habitaciones de sus casas para los turistas (los populares homestay). Salvo en lugares más grandes como Khorog no los encontrarás en internet, son lugares sencillos sin internet y muchas veces sin agua corriente para una ducha.
La acampada es libre y tu único problema será encontrar un lugar cómodo donde poner la tienda de campaña. Si tienes pensado acampar, recuerda llevar siempre el agua que vas a necesitar.
La aplicación de móvil más útil para viajar por la zona es IOverlander, ahí aparecen alojamientos, restaurantes, fuentes de agua… Todo tipo de información compartida directamente por otros viajeros. Y funciona offline. Sin duda una App que os recomiendo muchísimo.
Comida
No hay restaurantes por todas partes ni una cantidad exagerada de tiendas, por lo que te recomiendo ir atenta a IOverlander y siempre llevar algo de comida cargada por si acaso. También te aviso que la variedad culinaria no es algo que recordarás de este viaje…
¿Te gustaría recorrer esta carretera?
¿Hay algo más que te gustaría saber sobre el Pamir?
¡Espero todos tus comentarios!
2 respuestas
Hola, veo que fuísteis en moto, donde la alquilaron y cual fué el precio para los 10 dias?
saludos
Hola Jordi!
Nosotros fuimos con la moto desde España… Nuestro viaje fue Madrid – Mongolia, un poco más largo 😉 Pero el taller al que acudimos todos a poner a punto la moto es el Bike House Dushambe: http://www.tajmototour.tj Hablan inglés y son el único club motero del país. Ellos alquilan buenas motos.
Un saludo y buenas rutas!
Julia