En una visita a Estocolmo, la capital de Suecia, hay mucho que no debes perderte, pero para mí, uno de los grandes imprescindibles de esta ciudad, tanto para adultos como para quienes viajen con niños, es visitar el Museo Vasa.
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El museo Vasa de Estocolmo es uno de los museos que más me ha impresionado en mi vida. Ubicado en el centro de la ciudad, el museo es el hogar del Vasa, un barco de guerra del siglo XVII que se hundió en su viaje inaugural en 1628 y fue recuperado del fondo del puerto en 1961. Sí, del fondo del puerto porque el barco era tan pesado que se hundió a los pocos metros de zarpar.
Visitar el Museo Vasa de Estocolmo
Desde el momento en que entré en el museo, supe que iba a ser una experiencia única. El Vasa está expuesto en una gran sala, rodeado de paneles informativos y otros artefactos históricos relacionados con el barco y la época en que fue construido. La magnitud del barco es impresionante; tiene una altura de 52,5 metros y es la única nave de guerra del siglo XVII que ha sobrevivido casi intacta.
Historia del barco Vasa
El Vasa fue un navío que se construyó entre 1626 y 1628 por orden del rey sueco Gustavo II Vasa (así el barco toma el nombre por la dinastía reinante en ese momento). El objetivo era que se convirtiese en el mayor y el mejor buque de guerra jamás construido por la armada sueca. Se destinaría a las guerras contra Rusia, Dinamarca y Polonia.
Contaba con tres palos que podían sostener hasta diez velas y pesaba un total de 1200 toneladas. Fue diseñado como una nave de guerra, concebido para aguantar tanto los embates enemigos como las tormentas. Pero, una vez habían empezado los trabajos de construcción del Vasa, el rey solicitó un puente extra de cañones a bordo del barco, por lo que los planos tuvieron que modificarse sobre la marcha y los cálculos hacerse de nuevo. Y aquello no fue una gran idea.
El 10 de agosto de 1628 zarpó del puerto. Pero a escasos 300 metros un viento hizo que el barco se inclinase hacia un lado y que el agua comenzase a entrar por las ventanas de los cañones. En poco tiempo el barco se hundió y se llevó consigo a 30 de los 200 tripulantes.
Recorrido por el museo
Durante mi recorrido por el museo, pude disfrutar de la cantidad de detalles y cuidado que se ha puesto en la preservación del barco Vasa. El barco ha sido restaurado y conservado a lo largo de los años para asegurarse de que se mantenga en las mejores condiciones posibles y asombra ver el perfecto estado en el que está un barco que ha estado hundido en el fondo del mar más de 300 años.
A lo largo de la visita, se puede ver de cerca cada detalle del barco, desde su proa y popa hasta su mástil y sus cañones. También aprendí sobre la historia de la construcción del barco y sobre la época en que fue construido, un momento en que Suecia estaba en guerra con Polonia y Dinamarca.
Además, el museo ofrece visitas guiadas en diferentes idiomas, lo que permite a los visitantes obtener una comprensión más profunda de la historia y la cultura que rodean al barco. El museo también ofrece una amplia gama de exposiciones adicionales relacionadas con la historia de Estocolmo y la vida en Suecia en general. Se pueden ver artefactos y exhibiciones que ilustran la cultura y la historia de la ciudad, desde la época vikinga hasta la actualidad.
También debo mencionar la impresionante estructura arquitectónica del edificio. El museo está diseñado en torno al barco, con la intención de recrear la sensación de estar en el agua mientras se contempla el navío desde diferentes ángulos. El techo del museo es alto y permite la entrada de luz natural, lo que realza la majestuosidad del barco. Vaya, que no solo es increíble el contenido, también lo es el continente.
Fue fascinante ver de cerca uno de los barcos más grandes y mejor conservados de su época, y también aprender mucho sobre la historia y la cultura de Suecia.
El museo también cuenta con una tienda de regalos, donde se pueden adquirir recuerdos relacionados con el barco y la historia de Estocolmo. Además, hay un restaurante en el museo que ofrece comida y bebida típica sueca, con vistas al puerto y al agua.
En conclusión, mi visita al museo Vasa fue una experiencia única e inolvidable. Desde el impresionante barco hasta la arquitectura del museo y la rica historia de la ciudad, todo en conjunto hizo que mi visita fuera una de las mejores que he tenido en un museo. Recomiendo encarecidamente una visita al museo Vasa a cualquier persona que visite Estocolmo, ya que es una oportunidad para aprender sobre la historia y la cultura de Suecia de una manera inmersiva.
Información práctica
Dirección exacta: Galärvarvsvägen 14, 115 21, Estocolmo – en la isla Djurgården
Precio de la entrada: 170 coronas suecas (16,50 €)
Horario: Todos los días de 10:00 a 17:00, menos los miércoles que cierra a las 20:00
También puedes comprar una tarjeta Go City si tienes previsto disfrutar de otras actividades por Estocolmo, ya que incluye varios museos y actividades, además del Museo Vasa, como es el museo de los Premios Nobel, o el Museo Nórdico.